Ilustración. Illustration.
Modelado 3D. 3D Modeling
Impresión 3D. 3D Printing.
Arte Tradicional / Pintura. Traditional Art / Painting.
Motion Graphic, After Effects.
Cómic, Comic

Día del cómic gratis en YAKATA


Ilustrando en directo en Yakata junto con María Latorre, Balder y Roza




 La astenia primaveral llega pegando fuerte este año, al menos en mi caso, pero eso no me va a impedir redactar esta entrada en mi blog, la cual trata sobre la tarde del sábado en uno de mis sitios favoritos: 3 Espacios, también conocido como Yakata e Historietas.

Un poco de historia: 

 Para quien no lo conozca, Yakata, o Historietas, es una tienda de cómics situada en el centro de Murcia con 25 años de historia, donde tienen lugar numerosas actividades relacionadas con esta temática, a lo largo del año.

 En sus orígenes, su única denominación era Historietas, la cual era una tienda muy pequeñita que albergaba cómics de diversas procedencias y estilos. Con el tiempo y el boom del manga-anime en Murcia, surgió Yakata, una segunda tienda perteneciente a la misma familia pero especializada en manga, la cual fue durante muchos años el punto de encuentro donde decenas de otakus se reunían cada viernes, y también Urban, un tercer enclave dedicado al arte urbano.

 Con el tiempo, los tres locales decidieron fusionarse en uno solo, esta vez de grandes dimensiones, lo cual facilita la logística y permite realizar las actividades de las que hablaba al principio.


 Personalmente, es un lugar por el cual siento un gran apego, dado que pasé muchos años yendo cada fin de semana junto con muchos amigos que compartían mi misma afición. Es por esta misma razón que siento mucha nostalgia cada vez que voy, pero a la vez mucha alegría de encontrarme con nuevas generaciones que se reúnen al igual que yo hiciera en su día. No sé hasta que punto las personas son conscientes de la gran labor de inclusión social que se lleva a cabo en Yakata, pero sin duda debemos de agradecerles la cantidad de actividades culturales y de ocio que realizan cada mes, cediendo parte de su local de forma totalmente desinteresada.



 Y bueno, estoy hablando de porqué me gusta tanto Yakata, pero no del evento en el que participé como ilustradora. ¿He mencionado ya que la astenia primaveral me está destruyendo estos días? Pues os ruego que no me tengáis en cuenta los desvaríos :P

 Los años que pasé visitando Yakata asiduamente sin duda me marcaron en muchos aspectos, pero por aquella época no imaginaba que algún día me sentaría a dibujar como ilustradora profesional, y menos teniendo en cuenta la cantidad de giros argumentales que he dado durante mi formación artística... ¿Quieres que te cuente una historia?

Érase una vez...


 Comencé a dibujar de pequeña, como cualquier criatura de párvulos, a veces por divertimento personal, otras por testar mis capacidades imitando a mis personajes de dibujos preferidos. 
Este pasatiempo lo mantuve hasta los 12 o 13 años, cuando empecé a practicar con materiales y técnicas de dibujo más depuradas, a desarrollar mis propias historias, a inventarme personajes y a desarrollar pequeños cómics y documentos varios, que hoy día sé que se denominan biblias o documentos de preproducción, pero entonces no tenía ni idea. 

 Pasaron unos cuantos años, y conocí las posibilidades del diseño por ordenador, lo cual hizo que me interesara por otros medios y caminos, como los gifs animados, el #pixelart y la animación flash, dejando en segundo plano el dibujo tradicional, y con él los cómics y mis historias. No sería hasta comenzar mis estudios de Ilustración cuando retomara el contacto con el lápiz y el papel, sin embargo, me encontré con un inconveniente con el que no contaba: la discriminación de estilos. 

 Es un secreto a voces que ciertos profesores no consienten determinados estilos de dibujo. Bien porque no los consideran arte o simplemente no les gustan. El primer día en la escuela de arte se me etiquetó de dibujante de manga, pese a que por aquel entonces ya incluyera elementos de otros estilos, como el cómic americano, y ahí comenzaron mis batallas filosóficas en busca del aprobado.

 He de decir que nunca me disgustó el tener que cambiar de estilo, me lo tomé como un ejercicio más de clase, pero sí que me indignaba que me lo exigieran unicamente a mi, y que lejos de ayudarme, me hicieran sentir más perdida tras cada clase que daba. Por suerte al año siguiente me encontré con otros profesores infinitamente más comprensivos y mejor preparados, que lejos de fijarse en el estilo, hicieron hincapié en las técnicas y el proceso creativo, lo cual agradecí muchísimo. Pese a lo dicho, pasé muchos años sin poder dibujar una cara en condiciones, sentía mucha frustración cada vez que los ojos me salían más grandes de lo común, hasta que finalmente logré controlar las proporciones.

Si por casualidad eres aspirante a ilustrador y estás pasando por una situación parecida, mi consejo es:
TATAKAE!
(¡Lucha!)



 Dibujar manga sin tapujos para el día del cómic gratis me ha hecho sentir muy complacida, además de recordarme lo mucho que me gusta entintar y contar historias, tal como hiciera en mis primeras etapas. Contar con un público tan amable y cercano además me motiva a seguir haciendo eso que tanto me gusta, no solo por mi, por lo que me he planteado retomar un par de proyectos que tengo archivados desde hace años, pero esta vez con mi estilo personal y todo lo aprendido. Nada me haría más ilusión que veros disfrutar con ellos, al igual que con las ilustraciones que dibujé para vosotr@s en este día. 

¡Gracias a tod@s por acompañarme! ^__^




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